Valores Ambientales
2. Usos del suelo
3. La biodiversidad en la Huerta del Valle del Guadalhorce
4
. Espacios protegidos de la comarca
La comarca del Valle del Guadalhorce presenta una diversidad de ecosistemas forestales, fluviales, rupícolas, agrícolas… que junto con la benignidad del clima, actúan como escenario donde albergan una gran riqueza de especies vegetales y animales.
El Valle del Guadalhorce se encuentra enclavado entre una extensa alineación de sierras que nos definen territorial y culturalmente. La disposición administrativa junto con la organización orográfica de estas sierras, las Sierras de las Nieves, Blanca, Prieta, Alcaparaín, Aguas, Huma, de Abdalajís, Mijas, Alpujata, El Torcal y Montes de Málaga vertebradas por una importante red hidrológica protagonizado por el río Guadalhorce y sus afluentes (el Río Grande, el río Fahala, el arroyo Casarabonela, etc.) hacen que contemos con lugares de gran valor ambiental.
La comarca presenta una posición estratégica en una zona de migración de aves. La principal ruta migratoria entre Europa y África aprovecha el Valle del Guadalhorce para atravesar las sierras béticas en su aproximación al Estrecho de Gibraltar.
La localización del Valle del Guadalhorce, cercano a la Costa del Sol y de Málaga, está propiciando el desarrollo de una muy fuerte presión urbanística y como consecuencia de ello, la pérdida de espacios de naturales de interés.
1. El agua en el Valle del Guadalhorce
Las aguas superficiales de la comarca pertenecen a la Cuenca Mediterránea Andaluza.
Fuente: Página web oficial Agencia Andaluza del Agua
La Comarca del Valle del Guadalhorce posee unas características físicas y ambientales que favorecen la escorrentía superficial, al ser cauces con una alta capacidad de erosión y de transporte de sedimentos en caso de crecida, a lo que se añade la abundancia de cultivos agrícolas, con la presencia de una pequeña proporción de vegetación natural, la ribera, matorral o pequeñas áreas de repoblación arbórea que favorecen la escorrentía.
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1.1. Los ríos de la comarca
La presencia de los ríos en la comarca del Valle del Guadalhorce ha sido crucial para el establecimiento de los primeros asentamientos de las poblaciones humanas como son
Nescania (Valle de Abdalajís),
Iluro (Álora),
Cartima (Cártama),
Alhaur (Alhaurín el Grande),
Dazcuan (Coín), Almogía y más recientemente Pizarra.
Los ríos desempeñan importantes funciones en el territorio, entre las que destacan:
- Recarga los acuíferos detríticos, que corresponden a las vegas de los ríos y de donde muchos agricultores y una cantidad apreciable de poblaciones obtienen su cuota de agua disponible.
- Fertiliza las vegas, con abono natural constituido por nutrientes minerales y orgánicos recién arrancados de sus yacimientos naturales: rocas y riberas.
- Da de beber a las comunidades animales y vegetales de las riberas, que de otro modo desaparecen o son sustituidas por otras de menor interés ecológico y ambiental.
- Renueva sitios de alta productividad biológica como estuarios, deltas y marismas, que son los lugares de mayor productividad del Planeta y también de gran diversidad biológica por constituir la frontera entre el medio marino y el terrestre.
- Aporta nuevos materiales a nuestras playas de modo natural, evitando una irreparable pérdida para el turismo y evitándonos a todos pagar de nuestros bolsillos mil millonarias regeneraciones con lodos del fondo marino y ver destruidos sus ecosistemas.
- Desaliniza pozos, al recargar los acuíferos en zonas costeras se evita la intrusión de agua marina salada inutilizable para riegos y consumos humanos.
- Fertiliza los caladeros más cercanos a las costas, los nutrientes aportados al mar son aprovechados por zooplancton y fitoplancton, más tarde consumidos por los peces de los bancos costeros.
- … y al llegar al mar cierra el ciclo donde empezó.
Fuente: Grupo de Trabajo “Valle del Genal”, 2001
El río Guadalhorce
El río Guadalhorce nace en las Sierras de Gibalto y San Jorge (Loja, Granada), recorre sus aguas en la comarca de Antequera y tras cruzar por el Paraje Natural del Desfiladero de los Gaitanes, se hace adulto y forma su propio valle. Es allí donde unido a su principal afluente, el río Grande, crea el más rico de los suelos malagueños. Un valle que es al mismo tiempo camino y corredor fértil de huertas y gentes, anfiteatro de sierras que aportan sus aguas, su cobijo y su paisaje.
El río Guadalhorce está catalogado como
Lugar de Interés Comunitario (LIC) por su riqueza florística y faunística, sobre todo ornitológica destacando entre otras especies migratorias, la majestuosa
Cigüeña Negra (
Circonia nigra) que se encuentra catalogada en peligro de extinción.
El río Guadalhorce y sus afluentes los ríos Grande, Fahala y Pereilas y los arroyos Casarabonela, las Cañas y el Comendador, han trabajado a lo largo de muchos años y siguen trabajando en la fertilización de nuestra comarca a través del transporte de nutrientes minerales y orgánicos que actúan como un abono natural.
Las huertas de este territorio se encuentran claramente vinculadas al agua y su existencia se las debe a ella.
El río Grande
El
río Grande nace en la Sierra de las Nieves, en el término municipal Yunquera y discurre por los municipios de Tolox, Alozaina, Guaro, Coín y Cártama, donde desemboca en el río Guadalhorce junto al paraje de Casapalma tras alcanzar una longitud de unos 30 Km.
El río Grande riega a través de diferentes acequias muchas huertas que dan también importancia a esta comarca, campos y huertos que gracias a los aportes de agua proveen una gran cantidad de frutas y verduras durante todas las estaciones del año. Si por algo es conocido Coín es por sus huertas y Río Grande es su mejor benefactor.
Crocothemis erythraea en el río Grande Onychogomphus forcipatus
El río Fahala
El río Fahala es un afluente del río Guadalhorce, de unos 16 km de longitud y una cuenca de 62 km². Nace en el Puerto de los Pescadores, entre la Sierra de Mijas y la Sierra Alpujata, dentro del término municipal de Alhaurín el Grande. Discurre en dirección nordeste hasta el paraje de La Colonia, en el municipio de Cártama, donde vierte sus aguas al Guadalhorce.
El río Pereilas
El río Pereilas nace en la Sierra de la Alpujata y discurre por la Albuqueria, la Fuente, Valdeperales, Huertas Viejas y Huertas Nuevas entre huertas de naranjos y limoneros hasta unir sus aguas con el río Grande.
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2. Usos del suelo
La organización del espacio de cualquier territorio depende de la combinación compleja de las características ambientales, la organización social, las relaciones con el exterior y la presión demográfica. El resultado final es un modo peculiar de aprovechamiento del territorio, que se manifiesta en unos determinados patrones de ocupación del espacio.
Cada modelo de organización del espacio afecta de manera diferente a las características de los suelos (resistencia, capacidad de infiltración), a la cubierta vegetal e incluso a la topografía.
En consecuencia afecta a la erosión del suelo, la generación de escorrentía, la intensidad y frecuencia de avenidas, el aterramiento de embalses y la dinámica de sistemas sedimentarios (deltas, conos de deyección, llanuras aluviales). Es evidente que un cambio de envergadura en los usos del suelo introduce a su vez cambios de gran importancia en la dinámica hidrológica y geomorfológica.
El principal uso del suelo que aparece en la Comarca es el agrícola con predominio de cultivos de regadío de porte leñoso, fundamentalmente
cítricos y frutales. Los cultivos de olivar aparecen relegados a las zonas de mayor pendiente y menor productividad.
Son de destacar los usos recreativos de la Comarca. Prueba de ello son las rutas de senderismo y actividades deportivas que se desarrollan, un ejemplo es la ruta de senderismo por la Junta de Andalucía en el término municipal de Pizarra. Posee la denominación “
Contrastes y Azahar” y viene dada por el marcado contraste de vegetación, cultivos, topografía. La ruta, de pequeño recorrido circular, tiene una longitud total de 52 Km., quedando dividida en cuatro tramos. Se encuentra debidamente señalizada con diversos paneles indicativos e informativos a lo largo de la misma.
Usos agrícolas
El mayor porcentaje de la superficie comarcal se dedica al uso agrícola, predominado de entre todos los tipos de cultivos implantados los leñosos (cítricos y frutales principalmente). Los cultivos de olivar también aparecen en el territorio de la comarca pero en mucha menor superficie que los anteriores, quedando relegados a aquellas zonas donde el tipo de suelo y la elevada pendiente desaconseja la implantación de cultivos de cítricos y frutales.
En la zona de vega, donde los suelos presentan mayor productividad, se sitúan los cultivos de regadío, de entre los que destacan los cultivos de cítricos. El alto rendimiento y productividad de estas tierras se debe a la conjunción de la gran fertilidad que presentan y a factores como el régimen de lluvias y la calidez del clima, que dan como resultado la obtención de productos tempranos.
Tras las zonas de vega las tierras se vuelven cada vez más improductivas, siendo las aledañas a las llanuras de inundación las más beneficiadas por recibir un aporte extra de agua procedente de los cauces de los ríos o acuíferos. Los herbazales de secano se entremezclan paulatinamente con los cultivos de cítricos y los herbazales de regadío, para posteriormente dar paso a los leñosos de secano y el matorral pastizal, salpicados de manchas de cultivos de olivar.
Los cultivos hortícolas de concentran principalmente en los municipios de Coín y Alhaurín el Grande.
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Usos Forestales
Las zonas forestales que aparecen en la comarca se ubican en las zonas donde no se pueden implantar cultivos agrícolas por la baja productividad de los suelos y por las altas pendientes. Las superficies que ocupan no son muy elevadas, aproximadamente el 9% del total de la superficie de la comarca.
Son de destacar los usos recreativos de la comarca.
Prueba de ello son el agroturismo, las rutas gastronómicas, el senderismo y actividades deportivas como la bicicleta, el vuelo libre, el piragüismo, la ornitología que se desarrollan en nuestro entorno.
Un ejemplo es la ruta de senderismo por la Junta de Andalucía en el término municipal de Pizarra. Posee la denominación
“Contrastes y Azahar” y viene dada por el marcado contraste de vegetación, cultivos, topografía. La ruta, de pequeño recorrido circular, tiene una longitud total de 52 Km., quedando dividida en cuatro tramos. Se encuentra debidamente señalizada con diversos paneles indicativos e informativos a lo largo de la misma.
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3. La biodiversidad de la Huerta del Valle del Guadalhorce
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Mariposa arlequín (Zerynthia rumina)
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Águila real (Aquila chrysaetos)
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Las huertas son un tipo de
agroecosistema formado por una gran diversidad de plantas que aportan sombra, alimento y cobijo para muchos otros seres vivos, de los cuáles, la gran mayoría nos aportan grandes beneficios como la
polinización o el
control biológicos de plagas.
Las huertas del Valle del Guadalhorce y su entorno natural, son una
fuente de biodiversidad que incrementa la capacidad de respuesta ante cualquier situación adversa que se pueda dar en el ambiente. Cuanta mayor biodiversidad haya en un ecosistema, más estable es y menor es el riesgo de aparición de plagas y otros impactos que puedan acabar con él.
Cada vez son más los que están apostando en nuestra comarca por una
agricultura ecológica que respeta y mejora la gran diversidad de formas de vida presentes en nuestro territorio.
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Coleópteros copulando en una “flor bonita” o vinagreta
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Entorno natural de las huertas del valle del Guadalhorce
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Diversidad hortofrutícola
La benignidad del clima, el tipo de suelo y la orografía del terreno ha permitido que en el Valle del Guadalhorce se da una importante diversidad de cultivos, que van desde los cultivos típicos de secano, hasta cultivos típicos de regadío. Muchas de las variedades que actualmente cultivan son variedades locales, perfectamente adaptadas a su zona de producción y al conocimiento campesino. Esta diversidad de cultivos hace que el Valle del Guadalhorce se caracterice por su riqueza paisajística. “Las huertas guadalhorceñas” son auténticos vergeles donde se pueden encontrar multitud de especies frutales y hortícolas, lo que supone un importante recurso no solo paisajístico sino también genético.
Algunas variedades de tomates cultivadas en la Huerta del Guadalhorce
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La agricultura ecológica basa parte de su sistema en la utilización de variedades locales mas adaptadas al medio y al equilibrio ecosistémico necesario para poder producir sin tratamientos químicos y con productividades suficientes, lo que supone una oportunidad de viabilidad económica y de conservación para este tipo de sistemas agrarios, que se caracterizan por estar poco intensificados, por lo que su conversión en ecológicos no supone un cambio muy radical en las técnicas de cultivo.
La utilización de variedades locales supone un importante recurso tanto para la producción ecológica como para el propio territorio, pues le permite conservar de forma rentable un importante patrimonio genético, que la agricultura convencional está llevando a desaparecer.
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4. Espacios protegidos de la comarca
En la comarca encontramos una serie de espacios protegidos con la declaración de
LIC (Lugar de Importancia Comunitaria) y
ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) espacios regulados por las
Directivas Hábitats y de Aves que conforman la
Red Natura 2000, el principal instrumento para la conservación de la naturaleza en la Unión Europea.
En la comarca del Valle del Guadalhorce se encuentran ubicados los siguientes LIC´s :
1. Desfiladero de los Gaitanes
LIC, ZEPA y Paraje Natural con una superficie de 2.170,261 ha. Situado a pocos kilómetros de Álora, nos depara uno de los paisajes más impresionantes de la provincia, con paredes escarpadas y de altura considerable, entre las que discurre el río Guadalhorce después de pasar por los embalses del Chorro, del Guadalhorce, Guadalteba y del Gaitanejo. Llama la atención las dimensiones de este angosto cañón, con sus más de tres Kilómetros de longitud. En algunos tramos la anchura entre sus dos lados apenas sobrepasa los diez metros, lo que resulta aún más impresionante, sobre todo si se tiene en cuenta que a veces la altura de la garganta llega hasta los 700 metros.
2. Las Sierras de Abdalajís y de la Encantada Sur, (2.775,57 ha.).
Destacan por su importante valor ecológico por una serie de microclimas que lo hacen posible debido al gran número de manantiales que la circunda.
3. Las Sierras de Alcaparaín y de Aguas, (5.574,79 ha.).
La Sierra de Aguas es un paraje natural conformado por rocas peridotitas que posee flora y la fauna singular.
4. Ríos Guadalhorce, Fahala y Pereilas, (83,84 ha).
En las vegas de los ríos Guadalhorce, Fahala y Pereilas se encuentran numerosas huertas antiguas cultivadas en muchos casos mediante métodos agroecológicos. Estas huertas son zonas con altos valores mediaombientales que cuentan con la presencia de autenticas joyas ornitológicas como la amenazada
cigüeña negra, así como que se desarrollan junto a importantes hábitats como los “
Bosques de Galería de Salix alba y Populus alba” y
“Galerías y matorrales ribereños termomediterráneos (Nerio-Tamaricetea y Securinegion tinctoriae)”, siendo su conservación importante para dos especies incluidas dentro del anexo II de la Directiva 92/43/CEE, la Boga de río (
Chondrostoma polylepis) y la colmilleja (
Cobitis taenia).
Además, haciendo uso del
Plan Especial Protección del Medio Físico (PEPMF) de la provincia de Málaga , en la comarca encontramos las siguientes áreas protegidas:
- Sierra Blanca - Canucha - Alpujata.- Toda la sierra, pero especialmente su borde Sur, ejerce una influencia muy importante sobre la calidad paisajística de la costa de Málaga. Cuenta con importantes reservas de agua que se manifiestan en manantiales.
- Sierra de Mijas: con usos y aprovechamientos forestales, minería, explotación de recursos hídricos, cinegéticos y agroganaderos.
- Sierra de Abdalajís-Huma.- Integrada en el Paraje Natural Desfiladero de los Gaitanes, Los usos predominantes son los forestales y agrícolas pero también ha sido objeto de minería a cielo abierto.
Sierra de Pizarra.- Constituye un auténtico hito visual que destaca entre los montes, ligado al núcleo de población de Pizarra, al que sirve de telón de fondo, y al Valle del Guadalhorce.- Sierra de Cártama.- Otro importante hito paisajístico y territorial al actuar compartimentando el interior del valle del Guadalhorce junto con las sierras de Gibralgalia y Gorda de Coín.
- Sierra de Aguas.- A la importancia de su flora y fauna, se une su singularidad geológica formada por rocas de peridotitas.
- La Fuente - Cabecera del Río Alaminos. Espacio Natural clasificado como Paraje Sobresaliente.
Regadíos del Guadalhorce. En este espacio el Plan Especial remite el grado de protección específica a los planeamientos urbanísticos de los municipios implicados que deberán determinar qué zonas deben acogerse a Protección Especial y cuales pueden acoger usos no permitidos por esta protección.
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Infraestructuras Tradicionales protegidas: Vías Pecuarias
En la Comarca del Valle del Guadalhorce se detecta una importante red de vías pecuarias con cierta relevancia entre ellas las siguientes:
- Cañada Real de Sevilla a Málaga
- Colada
- Jabonera
- Colada de Álora a Málaga
- Cañada Real de Ronda; 5º
- Vereda de Antequera
- Vereda de la Alquería y Judío
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